Auditor interno
Los que se encargan de transmitir confianza y fiabilidad durante el proceso de auditoría, son los propios auditores. Por lo que deben contar con la experiencia suficiente como para transmitir dicha confianza a los clientes, ya que es un factor clave a la hora de que el resultado de una auditoría sea satisfactorio. Deben demostrar las siguientes competencias básicas:
- Tiene que presentar amplias cualidades personales, las cuales serán detalladas más adelante.
- Deben presentar una aptitud a la altura para poder aplicar todos los conocimientos y las habilidades que han adquirido a lo largo del tiempo, la formación que han recibido, la experiencia en otras auditorías, etc.
El concepto de competencias se compone para auditores del Sistema de Gestión de la Calidad y Medio Ambiente, en que deben tener conocimientos específicos para cada uno de los sistemas, y además de tener conocimientos genéricos de ambos, lo que facilita que dependiendo de que sea la auditoría un auditor pueda hacer una sola o ambas a la vez. A esto hay que sumarle, educación, experiencia laboral, experiencia en auditorias y formación como auditor.
Para que los auditores mejoran profesionalmente con el continuo desarrollo profesional que llevan a cabo y con la partición que realizan con regularidad en auditorías.
Las características más llamativas que debe poseer un auditor son las siguientes:
- Ser ético (imparcial, honesto…)
- Debe estar abierto a diferentes ideas o puntos de vista.
- Tiene que tener un trato cordial con las personas.
- Debe ser muy observador.
- Otra cualidad a tener en cuenta es que debe ser altamente intuitivo.
- Se tiene que adaptar fácilmente a las diferentes situaciones que se le puedan presentar y hacer frente a ellas de la mejor manera posible.
- Constante, para poder alcanzar los objetivos planificados.
- Muy seguro de sí mismo, para que no le hagan cambiar de opinión fácilmente, a la vez que es reacciona bien con los demás.