Las emergencias son eventos inesperados, no planificados, que impactan la seguridad y la salud de empleados, contratistas, miembros de la comunidad y otras partes interesadas. Las emergencias en ISO 45001 son abordadas por el estándar en la cláusula 8.2.
Concretamente, ISO 45001 solicita a las organizaciones la implementación y mantenimiento de procesos para responder de forma adecuada a las situaciones de emergencia, evitando lesiones o minimizando el impacto negativo.
Alcanzar la conformidad con lo solicitado en cuanto a preparación y respuesta a emergencias en ISO 45001 incluye, habitualmente, asegurar la provisión de servicios de primeros auxilios. Pero cuando el proceso se combina con otros procesos de preparación y respuesta ante emergencias, como los requeridos por ISO 14001 o ISO 22301, la organización debe asegurarse de abordar todos los impactos potenciales de seguridad y salud ocupacional. Y no debe suponer que los procesos relacionados con la seguridad contra incendios o emergencias ambientales, por ejemplo, son suficientes.
Así, a continuación, explicamos qué solicita la norma respecto a emergencias en ISO 45001 y qué incluir en los procesos que se deben poner en marcha
¿Cómo prepararse y responder ante emergencias en ISO 45001?
La preparación y respuesta a emergencias en ISO 45001 debe cubrir posibles eventos que se presenten dentro y fuera de las instalaciones de la organización. Se trata en esencia de abordar la contingencia, garantizando una atención e intervención inmediata, que disminuya la probabilidad de afectaciones graves.
Los aspectos más relevantes que deben abordar los procesos de preparación y respuesta a emergencias en ISO 45001 son:
- Respuesta planificada a emergencias, lo que puede incluir la provisión de primeros auxilios, la oportuna intervención de cuerpos de bomberos, de policía o militares, y el traslado de personas lesionadas a centros de asistencia sanitaria.
- Evaluar las necesidades y expectativas de todas las partes interesadas, de tal forma que sea posible asegurar su participación y asignar roles dentro de los procesos, relacionados con sus expectativas y sus funciones dentro de la organización.
- Capacitación para entrenar a todos los trabajadores sobre los procesos de preparación y respuesta, especialmente a aquellos que asumen responsabilidades específicas.
- Probar los procesos de preparación y respuesta a emergencias, lo cual puede requerir programar simulacros en los que se representen escenarios potenciales.
- Evaluar el desempeño de la organización tras las pruebas o simulacros, pero particularmente cuando se ha presentado una situación de emergencia real.
- Comunicar los procesos a todos los trabajadores, la operación práctica de ellos y las responsabilidades que cada uno de ellos tiene.
- Transmitir la información a otras partes interesadas, como contratistas, visitantes, miembros de la comunidad que pudiesen estar expuestos, organismos de socorro y asistencia, y organismos gubernamentales, entre los más relevantes.
Dentro de la planificación y puesta en marcha de los procesos para responder a emergencias, la organización prestará especial atención a las necesidades de personas con movilidad limitada, problemas de visión o de audición, o que presenten cualquier tipo de discapacidad.
Así mismo, es preciso revisar las obligaciones de cumplimiento pertinentes, como leyes y normas locales, nacionales o internacionales. También es preciso observar los requisitos de organismos reguladores y, por supuesto, los de ISO 45001.
¿Cuáles son los pasos a seguir en un proceso de preparación y respuesta a emergencias en ISO 45001?
El proceso de preparación y respuesta a emergencias en ISO 45001, basado en los elementos mencionados en el apartado anterior, sigue, como mínimo, estos pasos:
1. Identificar puntos críticos
Que son más vulnerables ante la ocurrencia de un evento disruptivo. Esto incluye revisar todas las ubicaciones geográficas de la organización, sus comunidades y la disponibilidad de servicios de atención o socorro.
2. Diseñar acciones para atender la emergencia
Estas acciones son las que, en su conjunto, constituyen el protocolo de acción ante una emergencia. Es probable que algunas de ellas, que en esta etapa se diseñan sobre el papel, deban ser modificadas en un paso posterior, una vez probadas.
3. Elaborar un procedimiento para evacuar
La evacuación es una de las acciones mencionadas en el punto anterior que, sin embargo, requiere un capítulo aparte. La evacuación requiere considerar las salidas, el número de personas que las utilizarán, la posibilidad de que alguna o varias de ellas estén bloqueadas, el punto al que se dirigirán las personas evacuadas…
4. Asignar responsabilidades
Durante una emergencia, una de las cosas que más ayuda presta es que las personas sepan exactamente qué hacer y “qué no hacer”. Tres, cinco o diez personas llamando de forma simultánea a organismos de socorro o de asistencia médica, no parece ser algo muy razonable. Esto no ocurre si se asignan responsabilidades para que todos sepan qué hacer y en qué momento.
5. Establecer los canales de comunicación con los servicios de emergencia
Esto implica contactar con antelación el organismo o la institución prestadora del servicio, conocer todos los canales de atención –teléfono fijo, móvil, e-mail, sitio web, chat-, así como las personas indicadas para contactar con prioridad en una emergencia. Estos canales deben ser probados y certificados, y, como ya se advirtió, la responsabilidad debe recaer en una sola persona para cada organismo.
Aprende cómo cumplir con los requisitos de preparación y respuesta ante emergencias en #ISO45001 y mejorar así la gestión de #SST #Riesgoslaborales Share on X6. Diseñar procedimientos para notificar a familiares y otras partes interesadas
Los únicos que necesitan información inmediata sobre la ocurrencia de un hecho disruptivo o una emergencia, no son solo los organismos de asistencia y socorro. También necesitarán dicha información los familiares, organismos reguladores, vecinos de la comunidad… Todos ellos deben ser alertados, entre otras razones, porque eventualmente ese conocimiento puede convertirse en ayuda.
7. Recopilar información vital en caso de emergencia
Planos de las instalaciones, ubicación de fuentes de agua internas y externas, identificación de puntos peligrosos como almacenamientos de combustible o generadores de energía eléctrica, nombres de las personas con responsabilidades asignadas dentro de una emergencia… Toda esta información debe imprimirse, entregarse y comunicarse por todos los medios posibles a todos los trabajadores.
8. Revisar los equipos susceptibles de ser usados en una emergencia
Extintores y mangueras para apagar el fuego son el ejemplo más claro de los equipos a revisar en este paso. Pero también es necesario revisar la existencia y funcionalidad de mascarillas, camillas, botiquines…
9. Probar el proceso de preparación y respuestas ante emergencias en ISO 45001
El simulacro es la forma tradicional, y la más eficiente, para probar la solidez y eficacia de lo que se ha diseñado sobre el papel. Este tipo de pruebas periódicas del proceso ayudan a identificar problemas o a mejorar aún mas lo que de por sí ya está bien.
10. Corregir, mejorar y volver a probar
Como todos los requisitos de ISO 45001, se espera que este proceso sea revisado, corregido y mejorado de forma continua. El conocido modelo PDCA es el mejor aliado para lograrlo.
La tecnología, finalmente, ayudará a construir procesos de preparación y respuesta ante emergencias en ISO 45001 que sirvan para alcanzar una conformidad, pero también para salvar vidas y mantener seguros a los trabajadores.
Las organizaciones que automatizan sus Sistemas de Gestión y los digitalizan, tendrán la tarea más fácil y sus trabajadores estarán mucho más seguros. La formación en seguridad ocupacional, sin duda, también es un elemento esencial.
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