El proyecto ISO 14001 puede surgir en una organización a partir de la propuesta del área de Gestión Ambiental o como resultado del requerimiento de un cliente, un grupo de consumidores o miembros de la comunidad en la que opera la organización.


Diplomado en Gestión Ambiental ISO 14001

Por supuesto, una organización que tiene en su agenda un proyecto ISO 14001 está lista para dar un importante paso en su desarrollo corporativo y en la forma en la que será percibida por terceros, sean estos empleados, consumidores, reguladores o miembros de su comunidad.

Es un paso importante, pero no por ello el éxito está asegurado. A pesar de la relevancia y de lo encomiable que puede ser un proyecto ISO 14001 para una empresa, el esfuerzo puede ser inútil si no se cuenta con los elementos que incrementan las posibilidades de éxito.

Cómo asegurar el éxito de un proyecto ISO 14001

Las organizaciones emprenden proyectos en diversas áreas a diario. No todos llegan a buen puerto, pero el objetivo es avanzar en la mayoría y convertirlos en factores clave del crecimiento de la organización. Uno de ellos es el proyecto ISO 14001.

Este, que además tendría que ser considerado un proyecto estratégico para cualquier organización, encuentra desafíos en el camino que podrían cambiar el rumbo y hacer que la organización abandone la implementación y desista de su interés por contar con la mejor herramienta para tratar los riesgos ambientales. La clave para que eso no ocurra es contar con cinco elementos clave:

1. Encontrar el punto de inicio

El punto de partida de una empresa será muy diferente al de otra, aunque pertenezcan a la misma industria. ¿Qué puede modificar el punto en el que se inicia un proyecto ISO 14001? El alcance del Sistema de Gestión Ambiental que determine la organización, las razones por las que decide iniciar la implementación de un SGA, el contexto y, sobre todo, el avance en el propósito de controlar sus impactos ambientales.

Las empresas se preocupan por gestionar sus riesgos ambientales, incluso antes de plantearse implementar un Sistema ISO 14001. ¿Qué relevancia tienen esos avances? Es lo que determinará un punto de partida común para cualquier proyecto ISO 14001. La fórmula para encontrarlo es el análisis de brechas.

El análisis de brechas, o análisis GAP, permite establecer qué se ha hecho para tratar los riesgos ambientales, qué parte o qué elementos de ese trabajo funcionan en el entorno de ISO 14001 y qué faltaría para alcanzar la conformidad con los requisitos de la norma. Por supuesto, es un estudio que pone a todos en contexto y los ubica en la casilla inicial del juego, de acuerdo con las condiciones de cada empresa.

2. Aval de la Alta Dirección

Muchos especialistas aún debaten sobre si es posible o no avanzar en un proyecto ISO 14001 sin el beneplácito de la Alta Dirección. La respuesta es negativa. Hay una razón concreta y específica para ello: la norma ISO 14001 pide como requisito que la Alta Dirección asuma el liderazgo del proyecto. Incluso va más allá, puesto que entrega a la Alta Dirección la responsabilidad de asignar recursos y responsabilidades y revisar la gestión.

De esta forma, un proyecto de implementación de ISO 14001 que eluda la participación de la Alta Dirección, por cualquier causa, podría tener un cierto éxito en el propósito general de minimizar o eliminar el impacto ambiental. Pero, sin duda, alcanzar la certificación y la conformidad con la norma es algo que no sucederá sin el aval de la Alta Dirección.

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3. Crear la estructura del proyecto ISO 14001

Hasta el momento se han sentado las bases sobre las que se construirá una estructura que permitirá gestionar y controlar los riesgos ambientales. El siguiente paso es construirla. La estructura funcional de ISO 14001 se basa en cuatro ejes, todos ellos de la misma importancia:

  • Política ambiental: la política medioambiental ISO 14001 es el documento que utiliza la Alta Dirección para afirmar su compromiso con la gestión, fijar los objetivos generales y expresar su decisión de asignar los recursos necesarios para implementar, certificar, mantener y mejorar el sistema.
  • Requisitos legales: ISO 14001 solicita a la organización identificar, comprender y cumplir con sus obligaciones legales, regulatorias, normativas o contractuales en el área ambiental.
  • Aspectos ambientales: los aspectos ambientales, en el contexto de ISO 14001, son las formas en las que la operación de la organización interactúa con el medio ambiente. Esta interacción no es necesariamente negativa. Algunos de estos aspectos generan impactos que son los que deben ser analizados y gestionados de forma prioritaria.
  • Objetivos del sistema: la política fija unos objetivos generales. El equipo implementador define objetivos puntuales a corto, medio y largo plazo y establece los indicadores para medir el logro de esas metas. Todo se documenta.

Estos son los documentos iniciales en el proyecto ISO 14001. Sin embargo, es necesario consultar la lista de documentos obligatorios para ISO 14001 para avanzar con paso seguro en la implementación.

4. Designar un equipo implementador

En este punto inicia lo que se podría definir como el trabajo de campo. Es preciso conformar un equipo que liderará la implementación de ISO 14001. En él es preciso contar con un especialista en gestión ambiental y algunos representantes de áreas claves como Producción, Recursos Humanos y Cumplimiento Legal. En algunas organizaciones se considera indispensable la presencia de un miembro de la Alta Dirección, lo cual no siempre es viable, pero sí conveniente.

5. Definir los recursos tecnológicos y de capacitación

Ha llegado el momento de solicitar los recursos necesarios para materializar el proyecto ISO 14001. El avance del equipo implementador permitirá establecer dos tipos de necesidades esenciales: tecnológicas y de formación.

Las organizaciones que ya transitan por el camino de la Transformación Digital no dejarán fuera de ese proyecto el Sistema de Gestión Ambiental. Las que no lo hacen aún, necesitan pensar en herramientas que automaticen el sistema como un factor determinante para el éxito del proyecto ISO 14001.

Lo que resta, que no es de menor importancia, es asegurar el conocimiento específico en el proyecto, conocimiento sobre gestión ambiental y sobre el estándar ISO 14001. Se plantean tres opciones:

  • Consultor externo, que se encargará de implementar el sistema, auditarlo y llevarlo a la certificación. Es una opción en la que usualmente no existe transferencia de conocimiento.
  • Crear un equipo híbrido, conformado por asesores externos y empleados de la organización noveles que tratarán de absorber conocimiento para garantizar la viabilidad del proyecto en el futuro sin dependencia externa.
  • Formar profesionales propios que, además de multiplicar el conocimiento al interior de la organización, establecerán un vínculo perenne con la empresa y se convertirán en líderes naturales de todas las iniciativas ambientales en el futuro.

Diplomado en Gestión Ambiental ISO 14001

El proyecto de implementación de un SGA necesita un líder con conocimiento profundo sobre el área, sobre el estándar, sobre las técnicas de auditoría y sobre el uso de la tecnología en la gestión. Estos cuatro pilares son los que sostienen la estructura del Diplomado en Gestión Ambiental ISO 14001, programa de la Escuela Europea de Excelencia que, además, entrega acreditación como auditor interno certificado.

Los alumnos de este Diplomado adquieren la capacitación necesaria para abordar la gestión ambiental de cualquier organización y liderar iniciativas destinadas a mejorarla. Si quieres conocer más detalles de un programa que te ayudará a abrirte camino en un futuro profesional prometedor, contacta con nuestros asesores.
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