La Gestión de Residuos suele pasar inadvertida dentro de las actividades de reciclaje. Si bien, una parte de los residuos pueden y deben ser reciclados, otra, que representa riegos ambientales y sanitarios y que tienen problemas evidentes para descomponerse y desintegrarse con prontitud, debe seguir un proceso diferente.
Los mayores retos para la Gestión de Residuos están en los componentes electrónicos. Pero también aparecen en la lista, entre otros elementos, las lámparas electrónicas, las baterías de relojes y teléfonos, o sustancias tóxicas o corrosivas.
ISO 14001 solicita considerar los aspectos ambientales durante toda la cadena de producción y el ciclo de vida del producto. Esto incluye, por supuesto, la disposición final, y es tema que también atañe a la Gestión de Residuos.
¿Qué es la Gestión de Residuos?
La Gestión de Residuos es un proceso establecido para eliminar los sobrantes que resultan del proceso de producción. Algunos de estos sobrantes entrarán a formar parte, como ya se advirtió, de la cadena de reciclaje.
Otros tendrán que ser desechados. Pero no es tan simple como abandonarlos en la basura. La disposición final de los residuos debe ser segura, eficiente y procurando eliminar cualquier impacto ambiental.
¿Qué pasos seguir para la Gestión de Residuos cumpliendo los requisitos de ISO 14001?
ISO 14001 no sugiere ni solicita un proceso específico para la Gestión de Residuos. Por eso, cada organización puede diseñarlo e implementarlo cuidando que se sigan las solicitudes del Estándar:
- Considerar la cadena de producción y el ciclo de vida del producto.
- Crear el proceso pensando en el riesgo y considerando todos los aspectos e impactos ambientales.
- Documentar y registrar eventos de importancia para la Gestión Ambiental.
Con esto en mente, una organización típica del sector industrial podría implementar un proceso de Gestión de Residuos que tome los siguientes pasos:
1. Identificar y evaluar los residuos
El primer paso es identificar los residuos y evaluar su posible impacto ambiental y los riesgos que pueden representar. Se deben separar los que pueden ser reciclados. Los restantes deben ser evaluados de acuerdo con el riesgo asociado a ellos.
Es necesario tener en cuenta que algunos de ellos pueden estar sujetos a algún tipo de regulación o legislación. Otros entrañan peligros para los trabajadores y para la comunidad. También es preciso considerar una categoría para plásticos y otros materiales semejantes, que son de difícil y lenta degradación y no siempre son reciclables.
2. Asegurar el almacenamiento seguro de los residuos
Mientras se llega a la etapa de disposición final de los residuos, es preciso asegurar un lugar de almacenamiento acorde con las características del material. En este paso es necesario considerar el estado del material: líquido, sólido, coloide, gas… Pero también es necesario considerar el peso, las dimensiones, si emanan olor o no, sin son corrosivo o tóxicos…
El contenedor, la caja o el almacén, de acuerdo con las características del material almacenado, será etiquetado con leyendas que adviertan sobre el peligro que entrañan: tóxico, corrosivo, venenoso, inflamable, explosivo, contaminante…
Los contenedores de residuos en espera de disposición final deben estar bajo techo, a salvo de humedad, fuentes de calor excesivo, contacto humano o fugas accidentales.
3. Etiquetar los residuos
Después de la etiqueta general de la que se habla en el paso anterior, será preciso etiquetar con el mayor detalle los residuos, especificando cantidades, características, el riesgo que puede implicar, instrucciones de manipulación y nombres de los responsables de su embalaje dentro de la organización.
Sigue estos siete pasos para la #GestiónDeResiduos según #ISO14001. Alcanzarás la conformidad con la norma y optimizarás la disposición de residuos Share on X4. Diseñar protocolos de transporte
Es poco frecuente que el lugar de disposición final se encuentre dentro de las instalaciones de la organización. Por ello es preciso diseñar un procedimiento de transporte, el cual se puede asignar a una organización especializada en esa actividad.
Es importante elegir una empresa que posea licencia para transportar residuos que requieren cuidados especiales: explosivos, químicos, corrosivos, venenos, tóxicos, inflamables…
Las personas de la organización que apoyarán la tarea al inicio de camino, dentro de la organización, necesitan recibir capacitación y Equipos de Protección Personal. En algunos casos, por protección de la organización o para cumplir con alguna ley, se contratará una póliza de seguros.
5. Considerar los riesgos
El enfoque basado en el riesgo está presente en todas las normas ISO. ISO 14001 no es la excepción. Por supuesto, la Gestión de Residuos se caracteriza por encontrar amenazas a cada paso.
La Gestión de Riesgos moderna es preventiva. Pero, en este caso, es necesario pensar en una emergencia y cómo atenderla. Los empleados deben estar capacitados para atender un evento disruptivo. Pero también se debe trabajar con el transportador o quien presta el servicio de almacenaje final, para coordinar esfuerzos en capacitación o en atención de desastres.
6. Capacitar a los empleados
La capacitación, mencionada en anteriores pasos, es tan importante que merece un apartado especial. Todos los empleados de la organización, en todas las áreas y niveles, deberían conocer el proceso de Gestión de Residuos.
Los que tienen responsabilidades específicas dentro de la Gestión, deben tomar programas de formación proporcionados por organizaciones expertas en el área, con docentes experimentados y con suficiente reconocimiento en ese campo.
La formación será tan profunda como lo requiera el empleado, de acuerdo con sus funciones dentro de la gestión, sus responsabilidades y sus atribuciones.
7. Documentar y registrar
La Gestión de Riesgos se revisa de forma periódica. Por eso es importante que todo lo que se haga se documente y se registre. Es, además, una forma de proporcionar a un auditor evidencia suficiente de la segura y eficaz disposición de residuos.
En cuanto a registros, es importante mencionar cantidades, tipo de residuos, tiempo de duración del proceso, personas y empresas que intervienen, fechas, incidentes dignos de ser mencionados, accidentes…
El proceso total implica gran responsabilidad. Muchas organizaciones han encontrado en la tecnología un aliado eficaz para garantizar la seguridad en la Gestión de Residuos. La automatización y digitalización del Sistema de Gestión Ambiental, basado en la norma ISO 14001, ha demostrado muy buenos resultados. La formación en la norma es otro ingrediente esencial.
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La Gestión Ambiental es hoy una preocupación prioritaria para todo tipo de organizaciones. Las empresas necesitan profesionales formados en esta área específica, pero también expertos en el estándar internacional más adoptado para esta tarea alrededor del mundo.
El Diplomado en Gestión Ambiental ISO 14001 es el resultado de años de investigación y desarrollo en la Escuela Europea de Excelencia. Este programa reúne una nómina sobresaliente de docentes, y es apoyado por ERCA – Registro Europeo de Auditores Certificados.
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