La gestión de riesgos ISO 31000 exige realizar análisis de causa raíz. No es suficiente con conocer la causa inmediata de un problema, sino que es preciso ahondar hasta encontrar la fuente, el origen del evento. Solo así podremos garantizar la no repetición.
La gestión de riesgos ISO 31000 hace uso de diversas herramientas para hacer un análisis de causa raíz. Ninguna de ellas es obligatoria ni imprescindible. Pero lo cierto es que emplearlas y, a ser posible, de modo conjunto resultará muy eficaz.
A continuación, nos adentramos en el proceso de análisis de la causa raíz y proponemos 3 de las herramientas más válidas para hacer la tarea.
¿Qué es el análisis de causa raíz en la gestión de riesgos ISO 31000?
El análisis de causa raíz es un proceso que descubre los orígenes de un problema, lo que permite diseñar las acciones correctivas adecuadas para solucionarlo y asegurar que no se repita. Supone que la prevención y la resolución sistemática de los problemas subyacentes es mucho más efectiva que el tratamiento de los síntomas puntuales inmediatos.
Un ejemplo sería que un empleado ha sufrido un accidente en el pie por no usar las botas de seguridad en una labor que lo requería. Podemos quedarnos en la causa inmediata: ese empleado no usó las botas. Pero si indagamos más, encontraremos la causa raíz: el empleado no había recibido formación sobre seguridad y salud en el trabajo. Es sobre esta causa sobre la que debemos iniciar medidas.
El análisis de la causa raíz resulta de especial importancia para la gestión de riesgos ISO 31000. En este contexto, se basa en un conjunto de técnicas y metodologías que permiten identificar la raíz de los problemas, tomar medidas para eliminarla de acuerdo a las posibilidades y asegurar que esos problemas no vuelvan a suceder.
Los objetivos del análisis de causa raíz en la Gestión de Riesgos ISO 31000
Los diversos métodos para realizar un análisis de causa raíz permiten alcanzar objetivos importantes en la gestión de riesgos ISO 31000:
- El propósito principal es descubrir el origen de un problema o evento.
- Un segundo objetivo es entender cómo resolver el problema y los problemas subyacentes relacionados con la causa raíz, limitarlos y extraer lecciones que serán aprovechadas en el futuro de la gestión de riesgos.
- Finalmente, es posible aprovechar este proceso para reproducir resultados positivos. No solo podemos descubrir el origen de un problema utilizando estos métodos. También podemos encontrar la causa de una oportunidad o de un evento afortunado, pero imprevisto para la organización.
Técnicas y métodos para realizar un análisis de causa raíz en gestión de riesgos ISO 31000
Existen varios métodos para esta labor, entre los que reseñamos los 3 más conocidos y utilizados:
1. Los 5 por qué
Es tal vez el método más popular y su efectividad es indiscutible. Tiene la gran ventaja de que se puede poner en marcha de un momento a otro, sin requerir complicados modelos ni estructuras complejas. Solo basta con empezar a preguntar “por qué”.
La estadística dice que 5 “porqués” son suficientes para encontrar la causa raíz. Pero en la práctica bien puede llegar la respuesta correcta al tercero o al décimo. Lo importante es que con la eliminación de esa causa estemos garantizando realmente que ese tipo de problema no vuelva a ocurrir.
Veamos un ejemplo con un diálogo entre un jugador de rugby que informa de un problema a su médico:
- Jugador: Tengo dolor de cabeza.
- Médico: ¿Por qué?
- J: Porque me esfuerzo mucho para ver. Tengo la visión nublada.
- M: ¿Por qué?
- J: Porque me golpeé la cabeza.
- M:¿Por qué?
- J: Porque en un entrenamiento otro jugador me empujó, caí y me hice daño.
- M:¿Por qué?
- J: Porque no llevaba el casco de protección.
- M: ¿Por qué?
- J: Porque los cascos en el vestuario no son suficientes para todos los jugadores.
Hemos encontrado la causa raíz del dolor de cabeza del jugador. Pero si seguimos indagando, tal vez se podrían encontrar problemas estructurales graves en el equipo, que podrían evidenciar mala gestión o incluso corrupción en la organización.
La #GestiónRiesgos en #ISO31000 exige la búsqueda de la causa raíz. Conocemos hoy tres modelos muy eficaces para esta tarea. Share on X2. Modelo de espina de pescado
Otra técnica común es la creación de un diagrama de espina de pescado o diagrama de Ishikawa, para representar visualmente las relaciones de causa y efecto. Esta herramienta sigue diferentes ramas de categorías que conducen a posibles causas, hasta encontrar la correcta.
Es un método similar al “5 por qué”, pero gráfico. Por lo general, comienza con un problema ubicado en el centro del diagrama: la espina central del pescado. Luego se procede a ubicar las diferentes categorías de causas (las espinas laterales). Una vez determinadas las categorías, se desglosan en elementos más pequeños. Así, al profundizar sobre las posibles causas y subcausas y cuestionar cada rama, es posible acercarse a los orígenes del problema.
Lluvia de ideas
Es un método muy utilizado en gestión de riesgos ISO 31000 porque se da naturalmente sin que nadie lo proponga, lo planifique o lo programe. Sin embargo, es importante que en la lluvia de ideas participen expertos o conocedores del área en la que se ha presentado el problema, entre ellos los de gestión de riesgos ISO 31001.
Además, es preciso nombrar un moderador y un asistente para que documente las ideas y las ubique en un tablero. Las notas adhesivas funcionan muy bien en este modelo.
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