Gestión empresarial

La gestión empresarial necesita de personas capaces de llevar el éxito a sus organizaciones. No todas las personas piensan igual ni cuentan con las mismas capacidades, ahí entra en juego nuestro cerebro.

Nuestro cerebro está formado por dos hemisferios, el izquierdo y el derecho, y alrededor de esta afirmación hay numerosos estudios que explican por qué una persona es más efectiva, más innovadora…

Cada hemisferio del cerebro está especializado en diferentes funciones, procesa información diferente y trata tipos distintos de problemas.

El hemisferio izquierdo es más lógico y verbal, mientras que el derecho es más intuitivo y creativo. En el siguiente cuadro podemos resumir las diferencias entre ambos.

Hemisferio derecho

Hemisferio izquierdo

Trata con imágenes Trata con palabras
Aborda totalidades Aborda partes y detalles
Sintetiza, lo que significa unir Analiza, lo que supone dividir y fragmentar
Piensa de modo simultáneo y holístico Piensa secuencialmente
Está exento de tiempo Está ligado al tiempo

En cada persona tiende a prevalecer un hemisferio, es decir, cada individuo tiene un hemisferio dominante.

Normalmente, suele predominar el hemisferio izquierdo, es decir, la parte lógica, mientras que la parte más artística o intuitiva de nosotros está más subordinada.

 

Cómo utilizar la parte derecha del cerebro para lograr el éxito en la gestión

  • Ampliar la perspectiva.

A veces para activar el hemisferio derecho del cerebro tiene que pasar algo imprevisto e impactante para nosotros, como por ejemplo la muerte de un ser querido. Es en ese momento cuando nos planteamos qué es lo verdaderamente importante, por qué estoy haciendo lo que hago.

Si somos proactivos, no es necesario esperar a estas circunstancias para plantearnos las cuestiones anteriores y así poder ampliar nuestra perspectiva, es decir, podríamos crear conscientemente nuestra propia perspectiva.

No obstante, hay algunas formas de hacerlo. Existen algunas técnicas que, por medio de la imaginación, nos ponen en contacto con nuestros valores, aunque el efecto final de todas siempre será el mismo. Una de esas técnicas puede ser imaginar que solo nos quedan seis meses de vida, esta experiencia hará que nos identifiquemos con lo que en realidad más nos importa, lo que queremos hacer y ser.

Estas técnicas se pueden extrapolar al entorno de la gestión empresarial con la finalidad de ejercer unas buenas prácticas.

  • Visualización y afirmación.

Para ejercer un claro liderazgo no basta con redactar un enunciado de la misión personal, es necesario mantener en mente la propia visión y los propios valores. En este sentido, la capacidad del hemisferio derecho del cerebro puede ser una gran ayuda para integrar en la vida de una persona su enunciado de misión personal.

Se trata de una práctica que cualquier persona puede emplear antes de una tarea como una presentación de ventas, un encuentro difícil, alcanzar una meta… si visualizamos y afirmamos estas situaciones no nos supondrán un momento complicado, sino que habremos creado una zona cómoda y no le provocará temor.

Se trata de una técnica de liderazgo personal efectivo, que surge de un fundamento conocido, nacido de propósitos y principios que pasan a ser el centro de la vida individual.

 

Roles y metas

Todos tenemos varios roles distintos en nuestra vida, diferentes capacidades en las que ejercer una determinada responsabilidad.

Cuando las personas dedicadas a la gestión trabajan para ser más efectivas, aparece el problema que consiste en que no piensan con suficiente amplitud. Quizás se están agotando trabajando y descuiden su salud, esto conduce a alcanzar el éxito profesional, pero desatienden relaciones de sus vidas.

A la hora de trabajar con la misión personal es más fácil hacerlo cuando se divide en las áreas de rol específicas de la vida y en las metas que se quieren alcanzar en cada área.

Por ejemplo, supongamos un rol profesional. Puede que nos dediquemos a las ventas, pero ¿qué perseguimos en esta área? ¿Cuáles son los valores que lo guían? Según nuestros roles personales… ¿Qué persigue esos roles? ¿Qué es importante para usted?

Redactar el enunciado de la misión en los términos de roles relevantes de la vida proporciona equilibrio y armonía. Así, tenemos presentes nuestros roles y se pueden revisar con frecuencia y tener la seguridad de que no quedamos absorbidos por ningún rol en particular ni descuidamos los demás.

 

Enunciados de la misión organizacional

Un enunciado de misión es vital para la buena organización de una empresa. Este enunciado debe ser efectivo, y para que sea así debe surgir de las entrañas de la organización. Debe nacer de la participación de todo el mundo, no solo de los planificadores superiores de la estrategia.

Existe una gran diferencia entre la efectividad de un enunciado de misión creado por todos los miembros de una organización y otro redactado por unos pocos ejecutivos.

Normalmente, las metas de las personas que trabajan en una organización son totalmente distintas a las metas de la propia empresa, y generalmente los sistemas de recompensa son completamente incongruentes con el sistema de valor enunciado.

Cuando se estudia algún enunciado de misión de alguna organización, cabe preguntarse ¿Cuántas personas de la organización saben que existe el enunciado de la misión?, ¿cuántas participaron en su creación? ¿Cuántos lo comparten y utilizan como referencia en la toma de decisiones?

En definitiva, sin participación no hay compromiso.

Para conocer más detalles sobre los hábitos para personas efectivas en la gestión no se pierdan las publicaciones de nuestro blog y nuestra sección de cursos.